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¿Cómo es la dieta sin gluten de los niños con celiaquía? ¿Es saludable, variada y equilibrada, además de sin gluten? Esta importante cuestión la analiza la Dra. Marta Suárez González, Licenciada en Ciencia y Tecnología de los Alimentos y Dietista-Nutricionista en el servicio de Pediatría del Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) en su Tesis Doctoral: Influencia de la educación nutricional en la enfermedad celiaca del niño: impacto del papel del dietista-nutricionista. Nos lo cuenta en el episodio 35 de Onda Celicidad.
La Tesis de la Dra. Suárez González comenzó con una consulta en la que se analizaba la dieta sin gluten de los niños celiacos que participaron en su estudio. «El objetivo era comprobar cómo se alimentaban, hacer la intervención y un tiempo después comprobar si habían cambiado hábitos a la hora de alimentarse. La intervención eran sesiones en las que les hablábamos de cómo hacer una dieta sin gluten, en este caso, que además fuese saludable. La idea es cambiar hábitos para que se alimenten de forma saludable».
Y partieron de una base que necesitaba mejoría. «Comprobamos en esa primera consulta que la alimentación no era equilibrada: exceso de grasas, azúcares simples y proteínas de origen animal. Por otro lado había un consumo deficitario de hidratos de carbono complejos», apunta la Dra. Suárez.
Además, «coincidiendo con la literatura que existe a día de hoy, se abusa de ultraprocesados. En concreto el 46% de los celiacos basa su alimentación en ultraprocesados y eso es una barbaridad», apunta.
Entre esos ultraprocesados, la Dra. Suárez destaca el «abuso de embutidos y fiambres que nos aportan grasas y sodio. El consumo de estos productos en niños es exagerado y a veces no se dan ni cuenta. Hay que cambiar esa idea de que los bocadillos sean siempre con embutidos, y ahí es fundamental que haya más educación por parte de los Dietistas-Nutricionistas, sanitarios especializados en esta materia».
De hecho comprobar de qué manera la educación por parte de estos profesionales influye en los hábitos de vida es uno de los grandes objetivos de la Tesis. «Vimos como los niños aprendían cosas de las que obviamente no tenían ni idea, y hemos comprobado cómo han cambiado hábitos tras las intervenciones que hicimos con ellos. Y aunque aún hay que seguir educando y trabajando para mejorar los hábitos de alimentación, hemos notado cambios», señala.
El abuso de procesados comienza por la mañana, apunta la experta. «El desayuno se hace con galletas que tienen una enorme cantidad de azúcar, y durante el resto del día hay gran presencia de carne y embutidos. Hemos visto que no comen fruta ni verduras y mucho menos pescado que carne. Cuando esto lo explicas, la gente toma nota y comienza a cambiar, pero si los D-N no tenemos la opción de educar en alimentación, no se van a producir esos cambios».
Por la consulta de la Dra. Suárez no solo pasan niños celiacos, «trabajo mucho con niños diabéticos, y cada vez vemos más niños con problemas relacionados con el sobrepeso y la obesidad, la diabetes tipo 2, la hipertensión, incluso el hígado graso. Todo esto pasa por cambiar hábitos: alimentarse mejor y hacer más ejercicio», afirma.
Y es que según refleja su tesis, los niños celiacos estudiados tampoco cubren los requerimientos recomendados de fibra, «y es muy importante que se consuma más fibra, que consuman alimentos frescos que de manera natural no contienen gluten y que además sean saludables».
Ser celiaco, destaca, «no significa ir al stand de los productos sin gluten, significa tener unos hábitos de alimentación saludables que además son sin gluten en este caso».
Recurrir a más frutas, verduras, legumbres, semillas, frutos secos y también a los integrales. «Los niños celiacos comen arroz, pero no consumen arroz integral, pues esto también hay que explicarlo. Igual que hay que explicar que es mejor que coman la fruta con la piel y que las verduras no se tienen porque cocer siempre, podemos disfrutar de una lasaña de verduras, de una pizza de coliflor, o una pizza con masa sin gluten y verduras. Hay muchas opciones, pero si seguimos pensando que a los niños no les gustan las verduras y no insistimos, no las van a comer».
La experta habla también de la industria alimentaria. «La palabra «sin» en una etiqueta llama mucho la atención, pero muchas veces enmascara productos menos sanos».
E insiste, «si no lo sabemos es normal que acabemos tomando decisiones de consumo erróneas, pero para eso estamos los Dietistas-Nutricionistas, para educar en materia de alimentación a la población. Por desgracia España es el único país de Europa donde nuestra profesión no está en la Sanidad Pública», lamenta.
Los datos del estudio de la Dra. Suárez, «son extrapolables a niños sin enfermedad celiaca, por desgracia», afirma.
Tras las intervenciones y las sesiones educativas, pasado un año, los niños volvieron a la consulta y se comprobó la importancia de esas sesiones. «Conseguimos que perdieran un 17% de grasa sin variar el peso, solo con el cambio de hábitos: una mejor alimentación y más ejercicio».
Y es que el cambio de hábitos es fundamental para «evitar el desarrollo de problemas tan graves como la obesidad infantil, que no deja de aumentar. Pero no es culpa de las familias, el problema es que falta educación y el sistema no cuenta con nosotros, los Dietistas-Nutricionistas para ofrecer toda esa información y ayudar a cambiar hábitos», explica.
Gracias !
Quisiera pedirte si hablas un poco cómo afectan las felculas de absorción rápida en el índice glucemico y cómo afecta el hígado y la salud
Gracias por todo el empeño y el trabajo que realizas