La anemia ferropénica es uno de los síntomas habituales de la celiaquía y entre un 8 y un 20% de las personas con anemia ferropénica que no responde a terapia oral, son celiacos. De hecho, los expertos señalan que es el síntoma extradigestivo de la celiaquía más común. El Dr. Jarque, Hematólogo del Hospital La Fe, de Valencia, nos explica la relación entre la celiaquía y la anemia ferropénica, en esta entrevista en Onda Celicidad.

Anemia ferropénica

La anemia es un trastorno por el cual la sangre cuenta con un número escaso de glóbulos rojos sanos, que son los encargados de transportar el oxígenos a todos los tejidos del organismo. Cuando hablamos de anemia ferropénica hablamos de uno de los tipos más frecuentes de anemia, que en este caso se debe a la insuficiencia de hierro, un mineral fundamental que se encarga de fabricar hemoglobina de los glóbulos rojos, que a su vez es la que traslada el oxígeno a los tejidos.

Anemia ferropénica y celiaquía

La anemia ferropénica se produce por tanto por escasez de hierro, y ésta se puede deber a diferentes causas. Cuando hablamos de personas con celiaquía, la causa suele ser una: los celiacos tienen problemas de malabsorción y no son capaces de absorber el hierro, con lo cuál este no pasa a la sangre y se produce ese déficit.

Normalmente el tratamiento para una persona con anemia ferropénica es sencillo, a base de suplementos de hierro que ayudan a llenar esos depósitos de ferritina. Sin embargo ésta terapia no funciona en los celiacos, tal y como explicó el Dr. Rodrigo en su ponencia en las Jornadas Cangas Sin Gluten. «Es la manifestación clínica inicial más frecuente y una de las manifestaciones extraintestinales más frecuentes», apunta el experto.

Rodrigo apunta que normalmente los celiacos no responden ante una terapia oral y que entre un 8 y un 20% de los pacientes en esta situación son celiacos, que mejoran los niveles de hierro en cuanto comienzan la dieta sin gluten y empieza su organismo a recuperarse. Normalmente, señala Rodrigo entre un 10 y un 25% de estos pacientes también tienen otras deficiencias como el ácido fólico y la vitamina B12.

Además también es habitual que los celiacos presenten niveles bajos de calcio y de vitamina D, sobre todo niños y adolescentes. Pero también es frecuente que el nivel de leucocitos sea bajo, dando lugar a una leucopenia. Por lo que un análisis de sangre de una persona con celiaquía puede ofrecer mucha información que conduzca al profesional de la salud a sospechar de un posible caso de enfermedad celiaca. En la guía 0 Gluten explicamos las conexiones de la celiaquía con otras enfermedades, los síntomas de la enfermedad (que varían en función de la edad), y las claves para realizar correctamente la dieta sin gluten.

Síntomas más habituales de la anemia ferropénica

  • Cansancio, fatiga, debilidad
  • Dolores frecuentes de cabeza
  • Confusión, mareos
  • Piel pálida
  • Irritabilidad
  • Manos y pies fríos
  • Falta de apetito
  • Uñas y cabello débil.
 

Anemia ferropénica: alimentos para combatirla

La anemia ferropénica es un proceso bastante habitual que en muchas ocasiones requiere de complementos de hierro para superarse, siempre siguiendo las pautas del médico especialista.

La alimentación también puede ser un aliado para luchar contra la anemia ferropénica. Algunos alimentos contra la anemia, con gran contenido en hierro, son las almejas, los cereales integrales (buscar opción apta para celiacos), las legumbres, vegetales verdes como espinacas y acelgas etc.

En esta entrevista, el Dr. Rodrigo explica las causas más frecuentes de malabsorción y la relación entre celiaquía y anemia ferropénica.